A solo dos días de que celebremos la Navidad y llenemos
nuestra mesa con los mejores manjares gastronómicos, me pregunto… ¿qué alimentos
llegan a China directamente desde España? La respuesta la encuentro en una entrevistaa Javier Sierra, Consejero de Agricultura de la Embajada de España en China que
publica el portal de noticias agroalimentarias qcom.es.
Según señala el 80 % de las exportación alimentaria española
a China en 2010 está representado por la
carne y los despojos de cerdo, el vino, el aceite de oliva y los productos de
la pesca. También abundan las exportaciones de lácteos
pasterizados, chocolates, conservas de pescado y vegetales, y zumos,
que tienen cada vez más presencia en los lineales de los
supermercados. En parte, el aumento de
estos productos pasterizados e infantiles de debe, según señala Sierra, a la crisis de los productoslácteos y sobre todo las leches infantiles que sacudió al país hace unos años y
como no, la buena reputación de nuestros productos infantiles.
(Te interesa leer: Danone, Nestlé y Mead Johnson se frotan las manos con el finde la política de hijo único)
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En 2010 las exportaciones agroalimentarias españolas a China
crecieron un 72% con respecto al año anterior, alcanzando un valor de 178
millones de euros (a lo que tendríamos que sumar las reexportaciones desde
China a Hong Kong), experimentando un crecimiento
mucho mayor que lo que han crecido las importaciones chinas agroalimentarias
totales que fueron del 39%.
Los datos que maneja el Consejero de Agricultura de la
Embajada de España en China para este año son muy halagüeños. “Continuamos con
unos crecimientos magníficos del 235% con respecto al trimestre del año
anterior, en vinos y aceite de oliva hemos multiplicado casi por 4, y por citar
más ejemplos, en porcino estamos exportando unos 500 contenedores al mes frente
a los 140-160 del año anterior.”
A tenor de lo expuesto anteriormente, los productos
españoles están de moda en el gigante asiático, pese a las dificultades para
exportar. Si se quiere vender un producto agroalimentario en China, lo primero
es comprobar que exista un protocolo sanitario firmado entre ambos países para
poder exportar, donde se pacten requisitos sanitarios y modelos de certificados
sanitarios entre ambos países.
Por otra parte, China exige que las exportaciones se
realicen a través de establecimientos aprobados por ellos, lo que supone una
inspección previa por parte de sus inspectores y un procedimiento de aprobación
que se extiende en el tiempo. Es decir, nos encontramos con barreras técnicas y
sanitarias que deben ser allanadas previamente por las autoridades sanitarias
españolas antes de que puedan las empresas comenzar a exportar.
Por otra parte, una vez en el mercado, las estrategias de
cada empresa son muy diferentes, y la demanda china es muy diferente a la
europea obviamente. Redes de frío, cultura negociadora, la barrera del idioma,
y la logística de la distribución son también factores muy relevantes.
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